lunes, 22 de septiembre de 2014

Del arabe al español

Más de cuatro mil palabras de origen morisco
se usan en la lengua española.

El árabe dio origen a vocablos españoles

"Sobre la alfombra y la almohada, e incluso en el diván encontré algunos granos de arroz que parecían cocinados con aceite".

Esta oración, tomada de una conversación cotidiana de un hogar guatemalteco no tiene nada de especial, en apariencia, pero hace uso de palabras que provienen del árabe, las cuales se adhirieron al español desde el milenio pasado, como consecuencia de los ocho siglos que los moros invadieron España.


Más de cuatro mil palabras aún se emplean; es decir, el 8 por ciento del vocabulario del español, incluyendo voces poco usadas.

Siglos atrás
En el año 711, grupos provenientes de oriente y del norte de África —árabes, sirios y bereberes—, de religión musulmana, derrotaron al rey visigodo Don Rodrigo en la batalla de Guadalete. Con este hecho empezó la dominación árabe de la península Ibérica, la cual se prolongó hasta 1492.
La conquista fue rápida. En menos de ocho meses invadieron toda Hispania, a excepción de una pequeña franja en el norte de la Península, donde los núcleos de resistencia dieron lugar a los reinos cristianos peninsulares, que fueron recortando progresivamente el espacio musulmán.
Durante este tiempo, España se islamizó y su nombre fue Al-Andalus y adoptó gran parte de las costumbres, cultura y lengua del invasor. Ese dominio jugó un papel importante en su evolución histórica.

Herencia plural
La influencia árabe en el castellano es fuerte, tanto que Rafael Lapesa, en su libro Historia de la lengua española, afirma que después del latín, el caudal léxico más importante del español está en los arabismos, al menos hasta el siglo XVI.
Estos términos se encuentran referidos en todos los campos. Por ejemplo, en el conocimiento y la ciencia están: algoritmo y cénit; nombres de constelaciones como Aldebarán e instituciones políticas como alcalde y alguacil, además de vocablos comerciales como almacén, arancel y aduana.
Muchos nombres de técnicas y oficios tienen este origen, tal es el caso de alfarero y albañil. También existen en el ámbito de la agricultura albaricoque, alcachofa, acelga, algarroba, naranja y limón.
Las continuas luchas con los cristianos proporcionó una gran cantidad de arabismos referentes a la guerra, por ejemplo: adalid, atalaya, alcázar, zaga, adarve, tambor, añafil, alférez, acicate y albarda, entre otras. Algunas palabras se remontan a orígenes diferentes del árabe, al sánscrito, por ejemplo: ajedrez y alcanfor; del persa, jazmín, azul, naranja, escarlata y del griego llegaron voces como arroz, alambique, acelga y alquimia.

Fuentes: www.cervantesvirtual.com/ jonkepa.wordpress.com/ www.juntadeandalucia.es

 Gabriel Panagiosoulis
De la Prensa Libre Guatemala