miércoles, 22 de enero de 2014


UNA VISIÓN ORIGINAL


¿Será el mismo Dios?


Gabriel Panagiosoulis  
El  trabajo en la cocina de restaurante en el bajo Manhattan era el comienzo de su opresión, el freno a sus aspiraciones académicas, el estancamiento de su ser en todos los niveles.
Maki  no tenía otra alternativa, el trabajo muy duro, muy fuerte,  le consumía todas sus fuerzas.  Transformaba  su  personalidad en un ser inmaduro, sin iniciativa para luchar.
Maki  un chico de 17 años, delgadito, de apariencia enfermiza y muy frágil,  lavaba  platos y vasos, barría el piso, pelaba papas, zanahorias, hacia puré de papas, cortaba las cajas de madera para llevarlas a la sala de basura.  Sus manos cubiertas de barros y espinillas, por el jabón tan fuerte que le producían una tremenda alergia, que le quemaba la piel.
La  soledad lo desesperaba, le comprimía el pecho, como si llevara todo el peso de estatus norteamericano en sus espaldas.
En su trabajo diario Maki tenía que recoger del mostrador las bandejas llenas de platos sucios, llenos de grasa y residuos de comida. También traía los vasos limpios para ser colocados en el área del bar, donde se reunían los clientes a tomar cerveza, especialmente aquellos de  la raza  blanca-de mejillas rojizas y pelo rubio quienes miraban a Maki con curiosidad y al verlo murmuraban entre sí.
Un día uno de ellos le agarró la mano y le dijo.
            -¿No tienes miedo que avise a la Migra?
Su compañero intervino y le dijo:
            -No lo molestes, abrió su billetera y le tiró  al piso una moneda de 0.25 centavos.
- Toma para que nos laves bien los vasos.-
La moneda rodó hacia el piso detrás del mostrador.
Maki le dio una patada y la pisó con sus enlodados zapatos.
-¿Si no hablas inglés para que vienes aquí?-  Le dijo el mismo cliente.
Este diálogo se lo explicó el cocinero que los estaba observando desde la ventanilla de la cocina.
Ana, la mesera, una muchacha con raíces italianas intervino y dijo a los clientes:
            -Ya paren de molestar.
De inmediato  Ana recogió  la moneda del piso, llamó a Maki en la cocina, le dio la moneda y le dijo:
            – No les prestes atención, son irlandeses que creen que este país les pertenece, lo mismo hacen con todos los que no hablan inglés.
Maki agarró la moneda,  la limpió del lodo, y se puso a observarla, de un lado tenía un  águila, y del otro lado la figura de una cabeza de un presidente norteamericano y las palabras. Libertad – en  Dios confiamos. Entró  en la cocina, lloró y pensó que para él no existía Dios. .
 La voz del dueño de restaurante lo despertó de sus pensamientos.
- Maki apúrate, tienes que mapear el piso, el tiempo vuela. 
Los clientes en las mesas de los manteles blancos parecían alegres, conversaban sin impórtales  lo más mínimo la presencia del trabajador humilde. Para ellos Maki era como un fantasma, un ser inexistente.
Maki sentía que no pertenecía a la raza humana, era como una mosca, de aquellas que caen en la trampa atraídas por la luz de los bombillos de una noche oscura sin Dios y sin esperanza.
 Dios mío, murmuró Maki, ayúdame.
Nueva York – 2014
Gabriel Panagiosoulis
Gabriel Panagiosoulis
Gabriel Panagiosoulis- Escritor griego que escribe textos cortos en español y en inglés. Ha publicado varios libros en su lengua natal: griego. Ha recibido varios premios literarios en Grecia. Nació en Pylaro, Cefalonia, Grecia. A la edad de 16 años emigró de su pueblo navegando como marinero buscando el sueño americano. Actualmente vive en El Bronx NY y escribe relatos y cuentos cortos en español, lengua que aprendió gracias a sus viajes por el mundo hispánico.

11 comentarios:

Μηθυμναίος dijo...

Me viene en mente un proverbio griego que traduciendolo, dice asì:
"Si te odian: ámalos! Si te hieren: los adòralos! Si en amargan: perdónalos! No te olvides: Son humanos…"

Una abrazo amigo!

Μηθυμναίος dijo...

Corrijo: Si te amargan... quise escribir mas arriba.

Dennis Kontarinis dijo...

Φίλε μου
Λόγω γλώσσας δεν μπορώ να συμμετέχω. Καταλαβαίνω όμως ότι είναι κάτι καλό
Ευχή μου να ταξιδέψει όμορφα.

Χαρά Θεοδωρίτση dijo...

Aγαπητέ μου Γαβρίλη χαίρομαι για το κάλεσμα και που σε βρήκα εδώ!
Μακάρι να μπορούσα να σε διαβάσω και ν απολαύσω τα γραπτά σου στο πρωτότυπο. ΄
Παρ όλα αυτά, λίγο ο μεταφραστής, λιγο οι πενιχρές μου γνώσεις στα Ιταλικά, με βοήθησαν να διαβάσω το κείμενο και να καταλάβω το νόημα.
Νάσαι καλά και να δημιουργείς ασταμάτητα
Καλό σου βράδυ απο την Ελλάδα
Με αγάπη
Χαρά

pylaros dijo...

Así como dice el proverbio griego, yo amo a todos,

somos humanos.

gracias po su visita

un abrazo

Gabriel

pylaros dijo...

Φίλε Ντένη ευχαριστώ για την επίσκεψή σου,

Ξέρεις σήερα το πρωί με έπιασε ένα ενθουσιασμός σα μικρό παιδί ότι κάποιοι βρήκαν τα γραπτά μου ενδιαφέροντα για δεύτερη φοτρά και τα δημοσίευσαν...

Ο τίτλος εννοεί αν είναι ο ίδιος Θεός για όλουςτους ανθρώπους...

Ευχαριστώ

Γαβριήλ

pylaros dijo...

Αγαπητή μου Χαρά,
Χίλα ευχαριστώ για την επίσκεψή σου, Ναι έλαβα το θάρρος να σου το στείλλω γιατί πολλες φορές βλέπω να έχεις επισκέπτες από άλλες γλώσσες και παρακολουθείς ξένα κείμενα τραγούδια κλπ
Σήμερα το πρωί
Ήμουν σαν ένα μικρό παιδί που του χαρίζουν μια καραμέλα.

ευχαριστώ

Γαβριήλ

nikol dijo...

Buenas noches desde Grecia Sr. Panagiosoulis. Leí la cita del texto, y yo quería que te deje un comentario de admiración, con la promesa de que voy a leer todo su trabajo desde el principio.
sinceramente
Maria Nikol Liakopoulou

pylaros dijo...

Fue una grata sorpresa de leer su mensaje, apreciable Nicol,
Te he visto muchas veces en la página web de amigo Strato a quien conozco personalmente.
Mi mayor anhelo es escribir, principalmente en griego, he tratado en español pero como no tengo seguidores lo he abandonado un poco.
En mi vida fui marino mercante conocí muchas partes del mundo incluso a Venezuela de aquellos años. Viví bastantes años en Guatemala donde procreamos una familia y de allá nos venimos a Nueva York.

Muchas gracias
sinceramente
Gabriel Panagiosoulis

nikol dijo...

Buenas noches de nuevo Sr. Panagiosoulis, he leído muchas páginas, tuve titubeos a dejar un comentario porque yo misma no tengo la escritura fuerte.
Con Stratos jodido el mismo suelo de Venezuela y personalmente se reunió con él en Grecia.
Gracias por la respuesta a la inmediata
Con aprecio y admiración.
Maria Nikol

pylaros dijo...

Apreciable Nicol
Muchas gracias por visitar la página de mis cuentos, los cuales son parte de mi vida.
Mejor dicho me mantienen ocupado escribiéndolos en los días fríos y solitarios den invierno. Paso mi tiempo así como dice el dicho “Recordar es vivir”

Me agradecería si me llamabas simplemente Gabriel
Saludos
Gabriel